Me emociona que a Blaki le guste mi compañía bloggera. Y me parecen muy reveladoras esas afotos aportadas por Manuel: no sabía yo de las inclinaciones cavecantarinas de Antonio.
Releyendo el Blog, percátome del descomunal número de garitos que hemos poblado a lo largo de los años. Recuerdo alguno, emeritense, que es preciso nombrar. Sin olvidar el Morgaño, presidido por un dibujo de Lolo Cerro, el Alcandoria, tantas veces citado, el Juan, diré que, para mí, el primero fue el Motoclub, adónde iba, frecuentemente, con Andrés Domínguez. Lo regentaba Jaime (Jaimitín era un apelativo cariñoso utilizado exclusivamente por Andrés). Solíamos aparecer animosos mas escasos de peculio.
Constituía el centro de reunión de los afamados Palpi. Evoquemos la mítica formación: Carlos Masegosa (voz), Juan Luis Parra (guitarra rítmica primero, luego teclados), Javi Cid (guitarra solista vertiginosa), José Manuel Arche (bajo) y el propio Andrés Domínguez (batería).
Era un bar como los de antes: con sinfonola. Tengo un recuerdo desteñido de que Javi Cid escuchó allí “Caballo negro”, de Sanlúcar, y seguidamente se puso a tocarla, como si nada. Un fenósmeno.
Aparte: se empieza a notar mucho que nuestra erudición procede, fundamentalmente, de la infatigable lectura de Astérix.
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