Mnav. 318 - Anas contra corriente en plena plaga bíblica

Ataviado con una red amarrada a cubierta pues tuve que pasar bajo el viaducto aónode las arañas tarantuleras ya citadas habían crecido como puños y pendían de hilos fantasmagóricos.
Usé la red motu gladiatori para aliviar la sensación de pánico arácnido ancestral.
A la postre no sirvió de Sodio pos los peludos bicharracos se colaban pol bujero del qjac, acho...

Máxima espesura de la flor do capim do vale como bien jicía el Djavan.
Capaz de engullir una nao y su tripulante en lo que dura la fotosíntesis elefantíaca que padece.



Páijeme a mín que la voraz planta, de bella flor de lys lila, san gullío hasta lords galápagos autóctonos y autónomos, los porbes, familias enteras de quelonios que habrán cebado la planta invasora.
A la vuelta de la travesida jipé un quelonio joven solitario, tomandol sol en una roca.
Sería incomprensible un rido Ana sin los bellos acorazados del terciario que tántas alegrías nords dieron.
Bédio ejemplar de garza real que al desplegar las alas emite un grito de locati maraviglioso..!!
Ahí se B a distancia real. La de arriba va con zoom.
Descansillo en un islote previo a las corrientes cataráticas/cataváticas del Ana.
De aquí palante hay que echar el bofe con la pala.

Ramal sin salida dieno de sorpresas:
rebufos, torbellinos, ramajes trampa...
Los 5 sentidos alerta para remontar éste demoníaco tramo, más propio del Hades y de la barca de Caronte que de la Cavecania misma.
Mnavegâmdo a contrapelo en brioso corcel amarelo...
Felicidad plena.
Nueva bifurcación ridosa.

Titánico esfuerzo de remonte teniendo como premio el ansiado descenso...
Brillo incólume del habua de bon matin.
Plenitud cordial, riqueza neuronal, curación xtrèma !!


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