Cónclave cavecano. Primera jornada, diamada "La emérita"

Día dos de enero de 2010. 5h30. El despertador de telefónica (el 096) urge a Lalo a que se incorpore. Ducha. Taxi. Estación dautobluses.

Luego, ruta hacia Magerit.

En Magerit, Transporte por medio de ferrocarril metropolitano (Circular, Andén 2, antigua línea 6, esa que ronda el centro de la tierra) hasta Men Dezalvaro. Allí, nuevo autoblús con destino Mnorba. La impaciencia lleva a Lalo a efectuar diversos zapatofonazos a Mossesba, cuyo móvil se encuentra, desgraciadamente, desconectado.

Arribada a Mnorba. Zapatófono a Blaki, para personarse en Emérita.

Urgente diamada de Mow. Móvil inexplicablemente desconectado durante todo el día. Se procede a reparar el error. Con inusual rapidez, el vehículo mosesbático traslada a ambos al centro telúrico de la Cavecania, donde Blaki espera impaciénete.

A la llegada, un cartel los recibe, demostrando que el Calbhe clásico vuelve a manifestarse en los territorios cavecanos. Recuérdese la célebre frase, tantas veces proferida a altas horas de la maniana: "No werbo a dí a la budda disgodeca, quencima, ni se lliga ni sodio". (En realidad la frase es una mezcla entre el phalbe y el lenguaje de "Mariano el sobrio", antológico personaje de Forges).

Tras una primera estación penitencial en bareto dan cá Yon Lennon, los tres intrépidos cavecanos tabulares se dirigen hacia el reencuentro con el resto de cavecanos eméritos, facción escindida, autodenominados "Los mirones" y conocidos por su falta de audacia al no atreverse a ascender al nivel alfa de participación.

El cónclave tuvo lugar en la Piazza Madhior, y se optó por no tomar asiento para mantener el cuerpo y la mente despiertos ante la importancia de los asuntos a tratar. De todos modos, el frío se encargó de conseguirlo.

En una imagen antológica de resonancias épicas, el siguiente daguerroafoto permite identificar la presencia de Lalo, Mossesba, Zar Digna, Vladimir, Carl Pintxo, Traque, Mendonça. (Las reglas del Congreso imponían la utilización de seudónimos).

El tono amigable de los daguerroafotos muestra el final de las deliberaciones, una vez alcanzados los acuerdos, pero oculta los durísimos momentos previos, plenos de discusiones sobre los estatutos del nuevo "Partido cavecano refundado", cuyo fin fundamental es propagar los principios programáticos de la cavecania y extenderlos más allá de las fronteras originarias.




Llamativa fue la guerrillera actitud del representante de la Cavecania Extremaña, con sede en Mañoburgo, empeñado en una suerte de régimen federal que le permitiera acaudillar sus propios feudos. Contaba con el voto delegado de Lowla y la Organización Zicutana Renovadora. Intentando recabar mayor peso argumentó que contaba también con el apoyo del núcleo cordobés, pero no presentó ninguna documentación acreditativa al respecto.




Las largas horas de deliberación acabaron pasando factura, y la necesidad de recuperar fuerzas con una adecuada manducación volvieron a traer al primer plano las disensiones internas, que culminaron con las dos facciones separándose en aras dencontrar el lugar adecuado para satisfacer los placeres de la gula.

En cualquier caso el borrador de los estatutos estaba ya aprobado...


En el intermedio se produjo visita a Shu y Sha, candaba laburando duramente en local nocturno y no pudo incorporarse a la fiesta. Pero salegró sobremanera con la visitación. Habbo sí se sumó a la colación nocturna, aunque no haya testimonios gráficos del evento.

Del recorrido por lugares emblemáticos de la Cavecania media deja constancia este daguerro en la barandidlla de l'hospital, do Blaki cantuvo a Lalo "Playa Girón" y "Madre" (incluyendo ese bajo en G#).





En un concurrido local de remembranzas jazzísticas se produjo la incorporación de un copioso grupo de eméritos/as, en el que destacaban por su desparpajo y simpatía las hermanas Puka y Nika Costa.

En un generoso acto de donación simbólica, las susodichas hermanas prestaron sus luengas cabelleras para suavizar en cierta medida la merma cabelleril quel paso de los años ha dejado en los egregios cavecanos. Obsérvese en el primer caso la transformación en el "Peco rubio" que produjo tal iniciativa.

Es rubiooooo el cabedio suertooooo damas luzal ojomorooooo

El extremañoburgués lució una elegante pajarita a lo largo de la noche emeritense, en dura competencia con la estilosa planta del baterida bucefálico.

Tomada a altas horas de la madrugada, la siguiente imagen revela la verdadera naturaleza del cavecano emérito de honor, mostrando la vera efigie del ínclito Blas Borroso.

Habiendo recuperado su mismidad, Borroso reflexiona sobre la dura jornada vivida y lo efímero de la existencia, mientras planea planes futuros.

Es un misterio saber por qué no aparece Habbo en ningún daguerro. Parte de la explicación es porque se incorporó a posteriori, tras el cónclave cavecano, pero... ¿y luego?

Son varias las versiones, pero la que cuenta con más apoyos es la que apunta que, como iba de negro riguroso, no sale en las fotos nocturnas.

Y hasta aquí este breve reportaje sobre la primera jornada, auténtico prodigio de sintonía y hermanamiéneto, ya que ha sido redactado al alimón mi limonero por las secciones emérita, mnórbica y mañoburguesa de la Cavecania Media.