lunes, 22 de septiembre de 2008

Ooooooooooossssssstiiiiiiiiitúúúúúúúú´!!!!


Auirshuyyya!!!! Carpincho entra en el globb!!!! Y con mano firme!!!! Mano de hierro en guante de seda!!!!!!

Bienvenido, compae, que te íbamos a poner falta.

No te preocupes si los recuerdos no aparecen al principio. Son como los braseros de picón que teníamos cuando chicos: parecía que se habían apagado, pero bastaba un escueto golpe de badil para que calentaran de nuevo.

Y si no te lo crees, ahí tienes uno que me acaba de venir con tu entrada: tras el concierto de Silvio y Pablo, en Salamanca, nos fuimos paí, enguitarrados, a gorjear. A la mañana siguiente nos comentaron que los trovadores habían estado cantando por la parte antigua.

-Pos nosotros anduvistuvimos pol-la zona, y no los vimos –señalé yo, en la inopia.

-Imbécil, erais vosotros –espetóme Helmant.

 

Y claro que nos vamos haciendo viejos. Nosajodío. Pero acuérdate de “hoy quisiera ser viejo, y muy sabio, y poderte decir lo que aquí no he podido decirte”. Igual ahora podemos expresar lo que entonces no sabíamos (Esto va también por Sir Francis Vaillant, que me expresaba la misma idea en una misiva privada).

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