martes, 4 de noviembre de 2008

Aportaciones a la mitología cavecana

Pensé que los plazos establecidos no me iban a permitir la intervención en el “Semenario sobre Mitología cavecana”, pero ante la actualización y vigencia de las fechas, puedo transcribir aquí, antes de su exposición pública, el resumen de la ponencia preparada para tal evento. El estudio recoge la traducción libre, muy libre, de un fragmento del “Líber Gaieumbarum” hurtado a los proveedores núñicos. Glosa así:

“Entre los cultos ejercidos por la tribu Gaieumbari, destaca su devoción por la diosa “Motherna”, cuyos ancestrales orígenes parecen proceder de la Britannia. Su culto desde allí debió extenderse al continente y a Hispania a través de los viajes en artilugios navegatorios descritos en otro capítulo y conocidos como cavecanoas.

Esta divinidad femenina se encarna en una mujer de gruesos volúmenes, con senos, vientre y nalgas acentuados. Para rendirle culto, los gaieumbari reúnense en grupo, aposentados sobre duros asientos y formulan cánticos al unísono. Uno de los pasajes más comunes repite a modo de salmo la frase: “¡Deseeeeum maaaater!”.
Se trata inequívocamente de alguna petición o rogativa. El abanico de invocaciones a que alude es muy diverso, y abarca desde las plegarias para encontrar pareja, al deseo de superar las pruebas evaluativas del trivium y el quadrivium. Otra de estas súplicas, atribuida a un subgrupo cavecano denominado “Acqua viva”, muestra la aspiración de comunicarse con el astro lunar.

A “Motherna” se dedican también curiosos exvotos, fabricados en un taller de Emérita Augusta regido por un tal “Blasus Barrosus”, al que algunos historiadores identifican con el bárbaro peregrino “Vladimir” reconvertido en ciudadano, si bien esta hipótesis no está confirmada. Los exvotos son realizados preferiblemente en metales preciosos de distinto grosor y valor. Combínanse en ellos las técnicas de la incisión y el repujado, incorporándose en las piezas más actuales otra técnica llamada filigrana, importada de pueblos asentados en la zona más lejana del mare nostrum. Sus productos son adquiridos por los fieles más devotos y depositados en los lugares de liturgia, aunque también hay quienes los portan sobre su cuerpo, pendiendo de las orejas o del cuello por medio de una catena. Una variante de estas piezas, al parecer sin fines religiosos, reproduce imágenes monumentales de la urbs, que se venden como recuerdo a los visitantes bárbaros.

El saludo por el que se reconocen los militantes de la secta presenta algunas variantes. El usado por los miembros más cultos consiste en pronunciar la frase admirativa: "¡Passa vobiscum!". Una segunda fórmula, de carácter sólo gestual, e inventada por uno de los líderes del grupo apodado “Pollinus”, consiste en tocar con el dedo índex la barriguita del correligionario. Una opción posterior consiste en masajear levemente el apéndice auricular del compañero al tiempo que se pronuncia una enigmática frase cuya traducción vulgar sería: “Déja que te toque el pulpejo”.

Es conocido que hay una sección conservadora dentro de la secta que propone una mayor austeridad y una vuelta a los orígenes más ortodoxos del culto, eliminando en buena medida iconos, amuletos y cánticos. Denuncian a los dirigentes actuales del grupo por considerarlos excesivamente “mothernos”. Se desconoce aún si dicha tendencia culminará con un cisma entre los devotos."


4 comentarios:

Cesare Camestres dijo...

¡Ya veréis cómo se va a poner Nuña cuando vea que todos los fragmentos de la historia gaeioumbari son de mejor calidad que el que le ha tocao a ella! No quiero ni imaginar la que va a liar!

Cesare Camestres dijo...

Uyuyuyuyuyuyuy!

O rei Wayavo I dijo...

Y ¿Qué podríamos hacer para calmarla?

O rei Wayavo I dijo...

Nuña..!!!
Atiende nuestras súplicas..!!!!